Los entrenamientos a doble turno que realizaron ayer los merengues tuvieron un gran y notorio ausente. Y es que, un complicado resfrío, acompañado de fiebre y dolor corporal, le impidieron a Nolbero Solano ir a trabajar junto a sus compañeros en Campo Mar. Según pudo informar el médico del club, Julio Segura, "Ñol" ya presentaba algunas molestias generalizadas desde el martes. Empero, esa misma noche, Solano le dijo al galeno que sus síntomas se habían incrementado, y en coordinación con el comando técnico, decidieron darle descanso ayer, y es muy probable que se pueda perder el cotejo del domingo ante Total Chalaco. De esa forma, el volante estuvo ayer en total inaactividad y medicándose con pastillas y analgésicos. Se espera que hoy vuelva a los entrenamientos. Entre tanto, Labarthe se mantiene en recuperación de su lesión en la pierna, mientras que Galván superó el esguince al tobillo y estaría desde el arranque ante Total Chalaco.