A su llegada al estadio Monumental, el bus de Sporting Cristal, que ayer venció a Universitario de Deportes por 3-0, fue rodeado por aproximadamente 20 hinchas cremas.
Uno de ellos, agarró una piedra y la tiró contra una de las lunas de dicha movilidad. El jugador celeste que viajaba en ese asiento era Nicolás Ayr quien afortunadamente supo moverse rápido para no ser afectado.
La Policía Nacional intervino inmediatamente y la cosa no pasó a mayores.