Para Germán Leguía, asesor deportivo de Universitario, el connato de bronca que hubo entre los jugadores Antonio Gonzales y Carlos Grossmüller fue algo cotidiano en un equipo grande.
"Se gritaron durante las prácticas. En mis épocas me comía varias mentadas de madre de Uribe, Oblitas, Rojas y Velásquez. Eso servía para reaccionar en nuestro juego. En todos los equipos grandes hay broncas. Esto que sirva a la interna para que se esmeren en competir por un puesto", expresó a EL BOCÓN.
Acto seguido, destacó la mano dura del entrenador Luis Fernando Suárez para comandar el grupo de jugadores. "En Universitario nadie se siente titular para él. Sentó a Antonio Gonzales y a Raúl Fernández. Apostó por Gustavo Dulanto y Josimar Vargas, el último partido puso a Javier Núñez y César Huamantica".