Dos cosas para resaltar en Gustavo Costas en este momento. Su humildad para mantener los pies sobre la tierra y la personalidad para reclamar lo que le parece justo: el pésimo arbitraje que le tocó vivir la noche del jueves ante Estudiantes. El técnico de Alianza Lima sabe que tras la buena campaña que viene cumpliendo en La Victoria, muchos lo pedirán para que chape el buzo de la selección peruana, pero él no piensa así. "Cuando decidí regresar a Matute no fue con la intención de chapar el buzo de la selección. Quiero hacer un buen papel en la Copa Libertadores en beneficio de la gente de Alianza, no por mí ni para estar en la selección, por ahora no pienso en eso", confiesa. El cariño del hincha blanquiazul -asegura- es su mejor regalo y motivación. "Eso me hace sentir feliz aquí, ese cariño hace que me sienta identificado con Alianza, que es como mí casa", agrega. No piensa en el futuro, por ahora sólo desea seguir avanzando en la Copa, aunque para eso tenga que hacer un llamado de atención a los dirigentes de la CONMEBOL por los malos arbitrajes. "Los cobros arbitrales, para todos, deben ser por igual, ya sea de una camiseta de Argentina o Brasil. Debe haber justicia para hacer un buen espectáculo y si por eso me tengo que pelear de nuevo, lo haré por Alianza y no importa que me expulsen, porque será la única forma de buscar justicia", culminó.