Tras cuernos, palos. Comerciante Unidos la pasa muy mal en lo económico, en lo deportivo y ahora la tendrá más difícil luego de que la Comisión de Justicia de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) decidiera emitir una resolución en la que suspende por 30 días al estadio Carlos A. Olivares de Guadalupe, donde el cuadro de Cutervo está jugando en calidad de local, luego de que el árbitro Michael Espinoza fuera agredido en el entretiempo del partido que protagonizaron las 'Aguilas Azules' ante Ayacucho FC y donde la visita iba ganando por 0-2, por la primera fecha del Torneo Clausura.
"Se resuelve declarar la prohibición al club Comerciantes Unidos de jugar partidos en el estadio Carlos Olivares de Guadalupe para los próximos 30 días", indica el comunicado de la comisión de justicia de la Federación de Fútbol local, recurriendo a la política de "tolerancia cero" en los estadios, con miras a desterrar la violencia en el deporte más popular del país.
Michael Espinoza, árbitro del cotejo entre Comerciantes Unidos y Ayacucho FC, fue agredido a puñetazos y amenazado con un arma por dos aficionados en el entretiempo de dicho partido y lo que más llama la atención es que el cotejo se disputaba a puertas cerradas y sin público, por lo que las autoridades decidieron suspender el compromiso.
La Comisión de Justicia señaló además que en un plazo de dos días se pronunciará sobre el reclamo de Ayacucho FC, que solicita dar por terminado el partido por razones de seguridad y recibir los tres puntos a su favor. Así Comerciantes Unidos es firme candidato para bajar a la Copa Perú en el 2019.
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