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El malestar de los hinchas de  por la goleada sufrida ante Huracán (4-0) por Copa Libertadores se convirtió en actos de violencia cuando esta mañana un grupo de barristas irrumpió en Matute para agredir a sus propios jugadores. 

Los furiosos hinchas, que portaban cuchillos y armas de fuego, llegaron al estadio Alejandro Villanueva minutos antes de que lo hagan los jugadores para el inicio de las prácticas. Integrantes del Comando Sur -que en la víspera amenazaron a sus jugadores y al técnico Guillermo Sanguinetti - exigieron la renuncia inmediata del 'Topo' e hicieron sentir su rechazo con pintas en las paredes del recinto blanquiazul. 

Ni bien aparecieron los jugadores, los hinchas los sorprendieron y comenzó a llover todo tipo  de insultos y amenazas, siendo Víctor Cedrón, Christian Cueva y Miguel Araujo los más cuestionados. Los ánimos se caldearon a tal punto que Cedrón terminó con la ceja rota tras recibir una fuerte golpiza por parte de los barristas. El volante, ensangrentado, fue directo a poner la respectiva denuncia a la comisaría.  Otros jugadores también fueron agredidos.

La Policía llegó al lugar para resguardar al plantel íntimo, pero los mismo empleados del club impidieron que los efectivos ingresen al estadio, dificultando así su labor. 

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