En Matute no solo han tomado las precauciones con el juego del atacante Roberto Ovelar. También saben que no pueden cometer faltas tontas cerca al área, porque el argentino Germán Pacheco es un especialista en pelota parada.
Para ello, el comando técnico ha trabajado en la semana con los jugadores para no caer en la provocación ni abusar del juego fuerte, porque por lo general los arbitrajes suelen ser localistas.
La zaga comandada por Walter Ibáñez y la primera línea de volantes quiere morder en el Elías Aguirre, pero sin jugar al filo del reglamento. Solo así Alianza estará en capacidad de obtener un buen resultado en Chiclayo.
"Hay que correr todo el partido para sacar un resultado positivo. En lo personal, quiero aprovechar esta chance del profesor (Sanguinetti) para demostrar que puedo ser útil al equipo. Dejaré la piel en el terreno de juego", señaló el volante Josimar Atoche.