Paolo Guerrero será una gran baja para el Corinthians en su próximo duelo del Brasileirao ante el Fluminense y eso lo saben muy bien sus compañeros, quienes salieron en defensa del peruano, que fue expulsado el pasado domingo ante Gremio en Porto Alegre.
"Estaba nervioso"
El sentir de los jugadores del timao fue unánime. Todos coincidieron que Guerrero no debió ver la cartulina roja tras el altercado que tuvo con Alan Ruiz.
"El nerviosismo es mayor porque estábamos cerca del empate. Estaba claro que Guerrero estaba nervioso. Estaba muy triste en el vestuario, no hizo nada. Ahora debemos estar tranquilos y continuar con el trabajo", dijo el zaguero Gil.
Otro que se unió a la causa fue el paraguayo Ángel Romero. "Paolo estaba muy molesto, porque no debió ser expulsado. Si recibió él la roja, otro de Gremio también debió pagar. Nos va hacer mucha falta en el siguiente partido", afirmó.