La noticia ayer no fue la destitución de Richard Páez de la dirección técnica de Alianza Lima. Sólo se consumaron los hechos. Decisiones que tardaron esperanzados en la recuperación del equipo que nunca se dio. Ahora en Matute se quedaron sin técnico, comprometidos más con la baja luego del triunfo de Aurich sobre Bolognesi y esperando conseguir un milagro a mitad de semana en el Cusco ante Cienciano. El sábado, después de la derrota ante la U, la Comisión de fútbol se reunió con carácter de urgencia. Eran las 8:00 p.m. cuando Carlos Franco, Jorge Villacorta, Mauricio Prado, Tito Ordóñez y Rolando Sánchez, por teléfono, decidieron por unanimidad destituir al técnico. Hoy mismo se tiene que ir, fue lo único que dijo el presidente blanquiazul antes de iniciar la reunión. Dejar en el banco a Wally Sánchez y apostar por su hijo Ricardo David, hicieron que el Doctor no tuviera más crédito. Pese a la recomendación hecha durante la semana por parte de la directiva de no variar el equipo, Páez se corrió el riesgo y cayó en el abismo. Villacorta fue el encargado de darle la noticia al venezolano. Ayer, Páez dirigió por última vez al equipo y al final de la práctica recibió la llamada fatal. Hizo el amago de salir por la puerta principal de Isabel La Católica, pero al final lo hizo la avenida Abtao. Salió corriendo, acompañado de su preparador físico Jorge Durand. Estoy preparado para lo que se venga. Mi posición es firme, no pienso renunciar. Me quedaré a cumplir mi contrato porque soy un hombre de retos. Eso lo sabe la dirigencia, le dijo Páez a EL BOCÓN. Lo que pasó por la tarde fue puro trámite. Páez se reunió con Franco para hablar sobre la penalidad que deberá pagar Alianza por rescindir el contrato unilateralmente. Son 105 mil dólares los que deberán desembolsar por la destitución. Quién reemplazará a Páez? Pensaron en Chalaca Gonzales, pero éste renunció. Lo que sí es seguro es que Antonio Alzamendi podría ponerse el buzo para la temporada 2009.