Jorge Choque Angulo Ya pasó todo. El llanto de la temprana caída. La frustración de no anotar. El deseo casi imposible de una hazaña. El despertar de una hinchada y la alegría final que quedará impreso por siempre en su memoria: El gol. Pero Germán Alemanno aún recuerda todo, cuadro a cuadro. El delantero cuenta lo que pensó mientras se elevaba tras el balón. "Mientras permanecía en el aire en lo único que pensaba era en pegarle a la pelota y que ingrese al arco. Miraba el balón, miraba el cielo, y mientras esperaba que el balón haya ingresado", dice. Confundido entre los recuerdos, Germán evoca los últimos minutos del partido ante Deportivo Quito. "Después del gol rapido de ellos, se nos cerraron y ya no podíamos llegar. Entonces llegó el penal y Arriola anotó. Ahí pensé que aún podíamos ganar. Pero expulsan a Arriola y se complica. Inmediatamente recibó el balón y salto, un salto raro, curioso, ja,ja,ja... Esos minutos finales fueron increíbles", refiere. Esa chalaca, también increíble, confiesa Germán nunca antes lo había hecho o intentado hacer. "Es la primera vez que lo hago, ni siquiera de chibolo; es el gol más lindo que tengo. Son sensaciones del partido que te inspiran. Todo esto es para darle una elagria al hincha sea o no sea de la San Martín", dice. -Y qué te dijo tu novia? Alemanno sonríe, no es mucho de hablar del tema. Amor y no palabras, podría ser su mensaje. "(Gerothy) me felicitó, estaba muy contenta", señaló el autor del gol que le dio el pase a San Martín en la Copa Sudamericana.