Al día siguiente de ser campeón con Binacional en Matute, Aldair Rodríguez mantiene la sonrisa en su rostro. Su primer título nacional lo encuentra en la etapa de la madurez en su carrera. El delantero que se apuntó con 11 goles en la Liga 1 de este año no oculta su más preciado interés a futuro: regresar a Alianza Lima, el club de sus amores. EL BOCÓN conversó con el atacante sobre Binacional, el título y sus sueños.
¿Qué fue lo primero que pensaste tras el pitazo final de Patricio Loustau pitó en Matute?
Sentí una gran felicidad, no lo podía creer. Conforme fueron pasando los minutos fui asimilando este gran momento. Lo único que quería era abrazar a mi familia y a mi novia. Festejar con ellos que son los que están en las malas.
¿Cierras el mejor año de tu carrera?
Sí, este ha sido mi mejor año, sin dudas. Me ha costado mucho poder conseguir estos objetivos. No fue nada fácil lograr tener la regularidad y los goles llegaron como resultado de un gran trabajo en equipo.
¿Qué fue vital para que este año mejores tu efectividad?
Creo que me tocaron grandes compañeros que supieron siempre asistirme para poder anotar. Yo siempre dispuesto a aportar mi granito de arena al grupo.
¿Sientes que te has repotenciado este año jugando como ‘9’?
Este fue mi primer año jugando bastante como delantero central. Fue el profe Arce quien me pone en dicha posición. Me dijo que me veía cualidades y que tranquilamente puedo jugar en ese puesto. Yo estoy cómodo siempre que juegue de delantero, con o sin compañía. Sin embargo, cuando juego como única punta tengo más espacios para poder movilizarme con más tranquilidad por todo el frente de ataque.
¿ Te gustaría regresar y consolidarte en alianza Lima?
Si me gustaría regresar a Alianza Lima. Creo que estoy en el mejor momento de mi carrera, con mayor madurez y más centrado. Pero, por ahora, no hay alguna oferta formal.
¿Cómo asumió el grupo la repentina partida de Juan Pablo Vergara?
Fue un momento muy complicado y duro. Cuando ocurrió nosotros no lo podíamos creer. Ir a entrenar al otro día y meternos la idea de que Juanpa estaba lesionado y no lo íbamos a poder ver fue muy difícil de asimilar. Pero supimos convertir el dolor en motivación para sacar adelante las dos finales.
LEE LA ENTREVISTA COMPLETA EN EL DIARIO IMPRESO DE EL BOCÓN (PÁGINA 2-3)