Cuando algún hincha del fútbol inglés habla del Manchester United, automáticamente se le viene el nombre del colorado Paul Scholes, quien dejó un legado en 20 años en el medio campo, con un juego elegante y una personalidad intachable. Sin embargo, para llegar a donde llegó, el ex futbolista tuvo que pasar por interminables situaciones en su adolescencia, cuando se convirtió en un hincha asiduo a los estadios.
La historia de cómo el fanatismo por el fútbol acercó a Paul Scholes al alcohol la contó en una reciente entrevista con la cadena ESPN, en la que dio su opinión sobre todos los temas relacionados al Manchester United. "Me encontré bebiendo jueves, viernes, sábado, domingo y lunes a veces", reconoció sobre sus primeros pasos en las tribunas del Old Trafford, antes de saltar al campo de juego.
Cuando le consultaron a Paul Scholes si todavía seguía teniendo relación con aquellas personas con las que compartía la tribuna en su adolescia, advirtió: "En realidad no, tuve que salir de ese ambiente. Bebía la noche antes de un partido. Estaba en una cultura en la que irías a los juegos y tomarías una copa en el autobús rumbo al estadio, y luego en el camino de regreso".
Finalmente, Paul Scholes contó que tuvo que dejar de lado esa rituna en las tribunas cuando vio que tenía la oportunidad de ser futbolista. "No es el entorno en el que quieres estar como futbolista. Me eligieron para un equipo de Inglaterra y recuerdo haber pesado: 'Tengo que salir de este entorno'. Estaba bebiendo, tenía sobrepeso. Necesitaba ponerme en forma, necesitaba salir del área y mis compañeros estaban bien al respecto".
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Alemania cayó ante Francia y logra el peor año de toda su historia https://t.co/YE7oQajia4 pic.twitter.com/jradI6EAda— Diario El Bocón (@elbocononline) 17 de octubre de 2018