Otra obra de arte de Lionel Messi. Sobre el final del partido, cuando ya se cerraban las persianas, el astro argentino se mandó con un soberbio tanto de falta directa, que decretó el empate del Barcelona sobre el Villarreal en el Madrigal.
El partido entró en su recta final con un Barcelona aún más volcado en ataque en busca del gol. El equipo de Luis Enrique veía como el Real Madrid se le distanciaba a seis puntos y con un partido menos los madridistas. Pese a los intentos, la buena disposición defensiva de los locales y la actuación de su portero evitaba que el acoso continuó del Barcelona obtuviera sus frutos.
Lionel Messi se paró frente el balón, a pocos metros del área rival. Con su habitual parado, el delantero hacía presagiar un potente remate con su pierna izquierda. Sonó el silbato y lo demás es cuento repetido. Messi clavó la pelota en la esquina del arco.
Imposible para el arquero, que solo atinó a mirar la pelota como ingresaba en su arco.
Su diana de falta directa le sitúa con trece en diecisiete jornadas del campeonato, una más que Luis Suárez y dos por encima de Cristiano Ronaldo y Aspas. El madridista marcó esta jornada uno de los cinco goles de su equipo al Granada; el celeste abrió el triunfo de su conjunto sobre el Málaga con el primer gol del encuentro.
Por detrás, Rubén Castro (Betis) sumó un tanto más, el octavo de la temporada, mientras que Nicola Sansone ya lleva siete, tras el gol que anotó este domingo ante el Barcelona.
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