Durante el partido entre Barcelona y Granada, el joven crack azulgrana Munir una chance inmejorable para poner el primer gol del partido.
Corrían nueve minutos de juego, ataque del Barza. Pelota por la derecha, centro al área rival, llega Mathieu por la izquierda y de bolea sirve hacia atrás.
Es cuando aparece Munir, que está solo abajo del arco solo para añadirlo. Sin embargo, no logra un buen control del balón y su remate va hacia la posición del arquero que había quedado desubicado tras el centro.