El partido ya marcaba dos a cero a favor del Athletic Bilbao. El encuentro válido por los octavos de final de la Copa del Rey era manejado por el conjunto local, que se imponía ante un tímido Barcelona. Sin embargo, apareció la magia de Lionel Messi.
A pesar de que no alcanzó para ganar el cotejo, Lionel Messi no regaló este golazo en su primer partido del año. El argentino mandó la pelota a guardar, incluso cuando el portero intentó poner las manos para que el balón no ingresara.
Algunos quedaron en duda si en verdad el esférico había ingresado en su totalidad. No obstante, una repetición más adelante confirmó que la pelota pasó la línea de meta.
"La eliminatoria está abierta. Lo hemos intentado hasta el final pero no pudimos hacer más goles", analizó el capitán del Barcelona en Gol Televisión.
Para el jugador azulgrana el Athletic "aprovechó sus ocasiones en la primera parte. Nosotros intentamos todo en la segunda. La eliminatoria está difícil pero ahora hay que jugar y ver que pasa en Barcelona", recordó.
El jugador del Barcelona rechazó hablar del árbitro. "Son lances del juego. Los árbitros a veces aciertan y otras no. El partido fue intenso como siempre en este campo. Intentaremos hacerlo bien en nuestro campo", concluyó.
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