Hace no muchos años atrás, el Bambino Pons, narrador argentino de Fox Sports, acuñó una singular frase para justificar cualquier decepcionante actuación o escandoloso yerro de algún futbolista que tenía el rótulo de figura. Ese lastimero "Para qué, te traje...", sonaba casi a remordimiento, pero graficaba de manera jocosa una dura realidad. Hoy traslado ese mismo lamento a tono de pregunta hacia Ricardo Gareca, técnico de la Selección peruana: ¿Para qué te traje?. Cuando empezó esta historia Edwin Oviedo, era un exitoso empresario devenido a advenedizo dirigente, que tras una fuerte inversión logró que Juan Aurich campeone en el torneo local. Tras la caída de Manuel Burga y ser tránsfuga de la lista de Federico Cúneo, sin saber ni leer, ni escribir -dicho esto como retórica- ascendió a ser presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), con el apoyo de todos los provincianos.
Una vez allí, Edwin Oviedo, presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), anunció que la suya sería una gestión empresarial, rodeándose de marketeros, publicistas, gerentes administrativos y demás, que de pronto deben ser muy eruditos y conocer mucho de sus profesiones, pero nada o muy poco de fútbol.
Con Juan Carlos Oblitas, director deportivo de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), la propuesta inicial era el proyecto Qatar 2022, con el colombiano Reinaldo Rueda como jefe de todas las categorías y el mandato de formar la Selección peruana del futuro que nos clasifique al Mundial. Empero, cuentan allegados a la Videna que a Juan Carlos Oblitas, director deportivo de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), no le agradaba mucho la idea de lidiar con un entrenador de mayores pergaminos que él, por lo que sugirió que para las Eliminatorias al Mundial Rusia 2018 dirigiera otro técnico, uno de su perfil, que le sea parecido y supuestamente de una talla menor -sin experiencia en selección- y ese no era otro que Ricardo Gareca (campeón con Universitario de Deportes y cuatro veces con Vélez Sarsfield para mayores referencias).
A Ricardo Gareca, técnico de la Selección peruana, se le dijo muy claro, algo asi: "No te preocupes del futuro, lo tuyo es solo las Eliminatorias al Mundial Rusia 2018, lo otro es cosa de Reinaldo Rueda (después el colombiano no vino y le dieron el encargo al argentino Daniel Ahmed). Es más, le pintaron que con los jugadores que teníamos en el extranjero bastaba en la Selección peruana y que con algunos del medio local tenía argumentos para pelear. Craso error. Los de afuera -en su mayoría divos- tenían "derechos adquiridos irrenunciables" (permisos, salidas nocturnas, aparecer con resaca a los entrenamientos, abandonar la concentración sin autorización del entrenador, entre otras cosas) que no encajan con el "compromiso" que requiere la Selección peruana.
En ese escenario tuvo que moverse Ricardo Gareca, técnico de la Selección peruana, y aunque por más que pretendió blindar a sus jugadores diciendo que él "no se mete en la vida privada", algo tarde, casi un año después se dio cuenta que lo habían decepcionado. Y algo más: que el universo local daba frutos, pero livianitos nomás, nada que marque la diferencia con las selecciones rivales.
Es ahí que Juan Carlos Oblitas, director deportivo de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), habla con Ricardo Gareca, técnico de la Selección peruana, y le cambia el discurso para el que lo había traído inicialmente y le da luz verde para que de oportunidad a una camada de jóvenes en las Copa América de Chile y Centenario, y deje de lado a los referentes, para ir buscando jugadores para el futuro. ¿Y el trabajo de Ahmed?, ¿Y la clasificación?, allí nomás, de pasito.
Después Ricardo Gareca, técnico de la Selección peruana, luego de la Copa América de Chile, reveló que en la Federación Peruana de Fútbol (FPF) le habían propuesto seguir hasta Qatar 22 (con Daniel Ahmed únicamente trabajando en menores), pero que antes deseaba cumplir su contrato y el objetivo de pelear la clasificación al Mundial. Todas decisiones -y cambios de decisiones- tomadas al paso.
¿Para qué te traje Ricardo Gareca?. Ricardo Gareca, técnico de la Selección peruana no merecía ser utilizado como un técnico fusible o al gusto político de sus empleadores, porque es un excelente profesional y mejor persona; pero igualmente novato y primerizo a nivel selección, con lo cual tampoco era el adecuado para comandar un proyecto de largo aliento, mínimo de 8 años o más, donde la experiencia de una misma persona (y no con un trabajo paralelo como hace Daniel Ahmed), es fundamental para hacer una revolución en nuestro fútbol en todas las categorías. Porque ¿qué pasa si después -con la próxima directiva de la FPF- viene un técnico para la Selección peruana con una idea distinta a la del Jefe de la Unidad Técnica de Menores?. Simplemente será lo mismo de siempre.
¿Para qué te traje Ricardo Gareca?, en la Federación Peruana de Fútbol (FPF) lo trajeron para ser el pararrayos con la hinchada hasta que se le acabe el crédito y de paso haga su pasantía como técnico de una selección.