El compromiso del hincha peruano con su selección es enorme. Varias horas antes de que el equipo de todos abandone la Videna rumbo al estadio Nacional para enfrentar a Bolivia, numerosos aficionados se concentraron a las afueras de complejo con la esperanza de poder ver a los jugadores y demostrarles su apoyo. Te sigo a todas partes Gente de todas partes se dio cita, intentando acercarse a los pupilos de Markarián, soportando el frío inclemente que invade las calles limeñas. Niños que recién salían del colegio, público cerrando las jornadas laborales y hasta madres de familia se mostraban ansiosos por verlos. La espera no fue en vano y a las 6:15 p.m. en punto el bus salió custodiado por un fuerte contingente policial. Los aficionados hacían lo posible por aproximarse. Los rostros de los jugadores fueron de verdadera sorpresa al ver tremenda manifestación. Walter Vílchez y el preparador de arqueros Óscar Ibáñez fueron los más efusivos al momento de reconocer el cariño del público. Instantes breves, pero eternos para el hincha. De vuelta a casa Una caravana escoltó a la selección hasta el Nacional, donde fueron recibidos con aires de gloria. La ansias se notaban en los jugadores que se mostrarían tras seis largos años en el primer escenario del Perú.